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Permission to Dance on Stage, la despedida de la virtualidad de BTS

5 . 11 . 2021, 4:37 pm

Una señal de que la normalidad regresó o quizás se adaptó pero que sólo nos dice que la música si se cae sabe levantarse y que los permisos no van con ella.

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Durante la madrugada del domingo 24 de octubre BTS realizó su último concierto online, Permission To Dance: On Stage, instancia en la que recorrieron hitos históricos de su repertorio como “Fire” y “Dynamite”, solo por nombrar ejemplos al paso.

Desde el estadio Olímpico de Seúl, mismo lugar donde cerraron su última gira de conciertos presenciales, el Love Yourself Tour: Speak Youself durante el 2019, y también lugar donde tuvieron su doble jornada de aniversario el pasado junio, la banda surcoreana cerró el ciclo digital para dar la bienvenida a una próxima presencialidad en Los Ángeles, California.

A diferencia de otros conciertos en línea que han realizado, este tuvo acceso a la prueba de sonido: una experiencia que solían proponer en sus shows presenciales y que por primera vez se probó mediante streaming. Siendo las 3 de la tarde en Corea del Sur, los siete miembros dieron la bienvenida y comenzaron el soundchek con un gusto semi amargo, ya que minutos antes, por redes sociales, Big Hit Music comunicó que Kim Taehyung, alias V, por motivos médicos no podría bailar, ni recorrer largas distancias, teniendo que estar la mayoría del recital sentado.

Con eso en mente, durante la prueba de sonido la banda ensayó tres canciones, “Life Goes On”, “Telepathy” y “Dis-ease”, todas de su último disco titulado “BE”, donde aloja la exitosa “Dynamite” que los disparó al mainstream occidental. Sin saberlo, dieron un adelanto de la versión final, no habrían canciones individuales como lo fue el Map Of The Soul ON:E.

Una vez terminado el primer encuentro, la espera es parte de ARMY y la cafeína el activo para quienes los ven desde el occidente, doce horas de diferencia no son un juego. Alarmas puestas, tickets validados y algún alimento. 

Pantalla a negro. Esposados y monocromáticos. Detenidos en una sala de interrogación los siete integrantes son identificados, no responden, entre el silencio V saca un clip de su boca, liberados escapan uno a uno y dejan al Jungkook, el Maknae (como se le llama a los menores de cada banda), a cargo de la nota de escape. “We don’t need permission to dance”.

Retumba la pantalla y detrás de las barras de la celda se les ve con sus trajes blancos, nuevos estilos y el fin de una era. El primer bloque fue activo, una entrada intensa con “ON”, “Fire”, “Dope” y “DNA”, la primera canción KPOP presentada en una premiación norteamericana.

Corte y cambio, frente a pantallas y de espalda a la cámara interpretaron la balada de su último disco “Blue & Grey”, un momento melancólico que llevó a la oscuridad que rodea la felicidad, esa que abundó durante todo un año. Combatiendo a esta, se quitan sus abrigos y el interludio de “Black Swan” se apodera del escenario.

Elegante y delicado, representando a cada miembro como un cisne en distintos compases, una vez formados se escucha “Do your thing with me know”, mientras bailan caen plumas negras, un cambio de piel, una transformación. Para recibir los cambios se debe recordar el origen, es así como trajeron a la vida “Blood, Sweat & Tears” y “Fake Love”.

Pantalla negra y en un sillón gigante “Life Goes On” se apodera de la escena, un cambio radical de escenografía, un espacio que grita felicidad y quita la rudeza de los 20 minutos anteriores. “Boy With Luv” encendió la escena, manteniéndola vibrante para la gran sorpresa del dance break con banda en vivo entre y “Dynamite (Tropical Remix)” y “Butter”, sus sencillos en inglés y líderes de los charts.

Una fiesta que se mantuvo con el Mash Up de “Airplane pt.2”, “Silver Spoon” (una de las favoritas de ARMY), “Telepathy”, “Stay” y para cerrar el bloque Jungkook: “Tengo algo que decirle a las personas que no les agrado… So What”.

Se acerca el final del bloque y del concierto, para despedir esta parte desde los altavoces se escucha “I Need U”, “Save Me” y la canción que gobernó su 2018 “IDOL”.

Corte y ultimo clip, comienza la despedida y la melancolía con el epílogo de “The Most Beautiful Moment in Life”, “Young Forever”, una canción que habla sobre seguir los sueños pese a las adversidades. Manteniendo el ambiente dan pie a “Spring Day” la canción que evitó su quiebre años anteriores y con ello, las palabras finales.

“Me he sentido empujado al límite, tratando de recordar lo que hice, quién era. Pero sabía que sería capaz de recordar cuando vine aquí. Y aunque V tuvo que sentarse y ustedes no estén aquí, me di cuenta de que no necesitaría ninguna motivación si tan solo pudiera celebrar un concierto”.

RM

“Llenamos toda la lista de canciones los siete. Fue un desafío para nosotros, y hubo momentos difíciles, averiguar cómo mantener la tensión. Realmente pusimos mucho esfuerzo, nuestras almas en decorar PTD On Stage. Nos preguntamos cómo nos encontraron”.

J- HOPE

“El Estadio Olímpico es realmente grande, y sin nadie aquí, se siente como un ensayo. Se está volviendo más difícil pensar en qué decir ahora que he dicho tanto sin ustedes aquí. Pero siento que nos vamos a encontrar pronto, así que hablemos más entonces”.

JIMIN

“Mi lema es ‘Prefiero morir que vivir sin pasión’, pero recientemente he estado sintiendo las brasas vacilar dentro de mí, sin alma, haga lo que haga. Pero parado aquí, en el escenario donde los ARMY están mirando desde lejos, me di cuenta de que necesitaba verlos”.

JUNGKOOK

“Cumplí los treinta, me duele aquí y allá, y realmente quiero hacer más conciertos antes de que sea demasiado viejo y se vuelva difícil mantener la energía como antes. Con el concierto de Los Ángeles como comienzo, encontraremos más oportunidades para conocerlos, así que por favor esperen hacia adelante”.

JIN

“Busqué nuestro Concierto Final y me sentí como un sueño, todo este lugar lleno de nadie con máscaras. Aunque no fue fácil llenar todos los escenarios juntos, comprendí que podremos reunirnos con ustedes aquí en el Estadio Olímpico la próxima vez”.

SUGA

“De hecho, me sentí triste (hoy). La herida llegó de repente. Practiqué anticipándome a lo feliz que sería durante el concierto, pero, lamentablemente, tuve que sentarme para el concierto en sí. Me ocuparé de mi condición y les mostraré lo que no pude esta noche”.

V

Con la emoción del reencuentro en vivo para fines de noviembre, se despiden de esta era con “Permission To Dance”, canción que da nombre al concierto y su segundo número uno del año.

Finalizando una etapa y comenzando otra, la emoción de salir de un estadio se siente en la piel y aumenta con la noticia de que se podrá ver vía streaming las ediciones en vivo. Una señal de que la normalidad regresó o quizás se adaptó pero que sólo nos dice que la música si se cae sabe levantarse y que los permisos no van con ella.

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